Regatear consiste en llegar a un precio justo tanto para el vendedor como para el comprador. Partiendo de esta premisa, el regateo es un arte que se practica en muchos países del mundo y es importante conocer en qué consiste este juego de tira y afloja antes de adentrarse en los bazares más populares. Apunta estos consejos para regatear; te serán de gran utilidad.
1. Mira y vuelve a mirar
No tengas prisa. Mira todos los puestos del mercado que consideres necesario y compara unos con otros, no te quedes con lo primero que veas. Lleva un cuaderno para hacer anotaciones, la memoria es traicionera. Como suelen ser espacios grandes y los puestos tendrán nombres que no resultarán familiares, es lo que tiene un idioma extranjero, apunta referencias; por ejemplo, dónde se encontraba el puesto, cómo era su cartel o el vendedor… Esto te ayudará después a no perderte y volver sobre tus pasos.
2. Si algo te gusta, contente
No muestres demasiado entusiasmo si, por fin, has encontrado aquello que tanto llevabas buscando. Lo mejor es que adoptes una actitud comedida; de este modo, queda abierta la puerta a la negociación.
3. Ten mucha paciencia
Dicen que un buen regateo, en el que tanto el experimentado vendedor como el comprador quedan satisfechos, suele durar entre 20 y 30 minutos. En Marruecos lo saben bien, por eso es tradicional romper el hielo con una taza de té.
Además de kilos de paciencia, que no te falte la sonrisa. Muéstrate tranquilo, sé respetuoso con el vendedor y con aquello que este ofrece.
4. El idioma no es un problema
Da igual donde estés, los comerciantes saben chapurrear mil lenguas diferentes. No obstante, no está de mal que aprendas algunas palabras básicas, de este modo, el vendedor verá que te interesas realmente, que te esfuerzas. Es también normal que el vendedor saque una calculadora y os la vayáis pasando, cada uno introduciendo la cifra que quiere, hasta llegar a un acuerdo.
5. Una retirada a tiempo…
Es una victoria también en el arte del regateo. Lo normal es que el comerciante, si está de acuerdo con la cantidad que le has ofrecido, evite que te vayas y reclame tu atención.
6. Lleva billetes pequeños y monedas
De este modo, no tendrás que esperar la vuelta y todo será más rápido. Los compradores, además, te lo agradecerán, pues siempre les viene bien tener cambio. Es mejor pagar con la moneda local que con euros o dólares. Si vas a la India, por ejemplo, pagarás con rupias.
7. No siempre
Ante todo, sentido común. En determinados países, como en Turquía, el arte del regateo es una práctica de lo más habitual, pero en otros lugares no es así. Lo mejor es ver, antes de viajar, si en los sitios que se van a visitar se estila este modo de venta-compra.
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